Desesperanza fortuita.

domingo, 26 de octubre de 2008

Con la ironía de no verte y de encontrarte en mis sueños, sufro cual arma nueva su destino fatal: el de herir otros mortalmente. Por eso he de encontrarte solo en mis sueños, solo en los sueños de una marioneta del destino.


¡Dime donde estas designio fortuito! ¡Dime donde escondes de mi tu faz para arrancártela a gritos, a llantos! dime donde te escondes y arrebatas de mi la dicha… de tu benevolencia destino ingrato, pues no concibo pensamiento en mi delirio, no concibo si no pesadillas, pues no encuentro cura para esta alma solitaria, para un amor fatuo no correspondido ¡dime donde estas para espantar esta melancolía!.